Los artículos de Álvaro Sanjuán son publicados los viernes y domingos en El Sol de Durango
sábado, 31 de marzo de 2012
De los cinco magníficos a los tres mosqueteros
“Uno para todos y todos para uno”
-Alejandro Dumas, escritor.
Un día llegaron a Durango, de esto hace ya más de 30 años, eran los tiempos de los 70’s, la herida de Tlatelolco estaba reciente, el movimiento del ’68 cobró muchas vidas, pero también nos heredó muchos líderes, unos acabaron en la izquierda y otros en el PRI, hoy, usted los puede ver de diputados y senadores, o en la administración pública federal. Un día se dieron cuenta de que la guerrilla no era el camino, mucho menos haber luchado al lado de Lucio Cabañas Barrientos o Genaro Vázquez Rojas, y mucho menos aún andar en las montañas de manera clandestina con el EPR. Teniendo como guía y pastor a Adolfo Uribe, arribaron a nuestra ex callada y tranquila ciudad colonial los grandes conocedores de la política de masas, al más puro estilo maoísta, el hoy considerado su líder moral, Alejandro González Yáñez, del estado de México, Primitivo Ríos, del DF, Gustavo Pedro Cortés, de Oaxaca y los hermanos, hoy en desgracia política, Juan y Marcos Cruz Martínez, del vecino estado de Coahuila.
Decía Emiliano Zapata que la tierra es de quien la trabaja, y los cinco magníficos tomaron como ejemplo la frase del caudillo del sur, la adaptaron a los tiempos modernos, y quedó así: “Los terrenos son de quiénes los invaden”. El predio La Virgen, que un día fue propiedad de la familia Avelar, es el ejemplo más emblemático, aunque hubo otras invasiones que se quedaron en la historia. Por varias razones, y por falta de espacio, seremos muy breves. No podemos olvidar al famoso comité de defensa popular, CDP, que tanto negocio les significó a los cinco magníficos. Hoy, los terrenos que invadieron, están habitados por familias que no han podido salir de sus condiciones de pobreza, en cambio, sus líderes morales, unos viven en zonas residenciales, otros, para despistar al enemigo viven en casas modestas. Sin embargo, en la ciudad de México no vaya a usted a pensar que viven en alguna vecindad de la colonia Guerrero, aquí en Durango construyen mansiones a la salida de alguna carretera, hoy, han comprado muchas propiedades como parte de un proyecto educativo ejemplo a nivel nacional, pero nadie sabe si dichas propiedades fueron adquiridas con recursos públicos o privados. Ojalá que la ley de transparencia, que por cierto funciona muy bien, nos saque de la duda. Ahora es otra historia, atrás quedaron las luchas del CDP, las invasiones, la toma de calles, las consignas como aquella de “Ni PRI ni PAN, gobierno popular” Un día comprendieron que era mejor negocio fundar un partido político, y así nació el PT.
Dando clases de cómo se toma el poder, para nuestro asombro, dos personajes que no nacieron en Durango llegaron a la presidencia municipal: Alejandro González Yáñez y Marcos Cruz Martínez. Casi logran la gloria cuando Gonzalo estuvo a punto de ser gobernador, a cambio de eso, no les ha ido tan mal. Si no son diputados locales, son diputados federales o senadores. Aun perdiendo la presidencia de la república en el 2012 Andrés Manuel López Obrador, es muy probable que los veamos en alguna de las cámaras, para que los pobres de Durango sigamos teniendo a nuestro Robin Hood. El poder es como las mujeres hermosas, los hombres terminan peleándose por ellas. Y esto sucedió con el PT en Durango. Como muchos partidos en México, son de amigos o familiares y el Partido del Trabajo no es la excepción. Durante un tiempo, con la salida de Gonzalo, la gerencia del partido estuvo a cargo de Marcos Cruz, González Yáñez se movió en las esferas del poder en México y logró recuperar su patrimonio, conocido como el nuevo PT , generoso y amoroso. Debido a las pugnas al interior de este partido por los puestos públicos, los de elección popular y los millones de pesos que les llegan cada mes, fue la razón de que hoy, en lugar de tener 5 magníficos, como en la novela de Alejandro Dumas, sólo tenemos a los 3 mosqueteros. El del estado de México, Gonzalo Yáñez, el de Oaxaca, Gustavo Pedro Cortés y el del DF, Primitivo Ríos. De haber quedado sólo tres de los cinco originales, en los hechos no significa que anden con una mano atrás y otra adelante, es todo lo contrario. Hoy podrían retirarse a la vida privada sin correr el riesgo de que un día vivan en la pobreza extrema, porque se comprueba que es más fácil hacerse millonario que acabar con los millones de pobres en el país y los miles que hay en Durango.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Seguidores
Datos personales

- Álvaro Sanjuán
- Que se acabe el gatopardismo en México, que cuando algo cambie, que no siga igual, que sea para bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario