Cuauhtémoc Cárdenas le dijo al PRD: "Estas ruinas que ves..."

"Antes nos gustaba decir que la derecha era estúpida, pero hoy en día no conozco nada más estúpido que la izquierda"
-José Saramago, Premio Nobel de Literatura
El PRD cumplió años el pasado 5 de mayo. Comparado con los que tienen de fundados el PRI y el PAN, el Partido de la Revolución Democrática es, apenas, un jovenzuelo. El PRI acaba de cumplir 85 años y sigue tan campante como aquel famoso comercial que anunciaba un whisky. De esos 85, setenta años ha tenido el poder presidencial. El PAN, que también ya llegó a la tercera edad, algo así como el INSEN político, porque ya tiene 75 años bien cumpliditos, pero ya le podrá contar a sus nietos que sí supo lo que era vivir en Los Pinos, porque fueron inquilinos durante doce años y, como uno se acostumbra a lo bueno, quieren regresar en 2018. El PRD desde su nacimiento fue un niño precoz, debido a que sus padres aprendieron de lo lindo las mañas del viejo PRI, como partido político ha hecho una carrera política de fast track que ya la quisieran algunos partidos que nunca pasarán de satélites y paleros.

Pocos partidos en el mundo pueden presumir como el PRD que en tan solo 25 años de existencia, antes de que naciera le robaron la presidencia de la república en 1988, obra maestra de dos distinguidos miembros del club "Nicolás Maquiavelo A.C": Carlos Salinas de Gortari y Diego Fernández de Cevallos. La segunda sucedió cuando se juntaron el PRI y el PAN, Televisa y los demás poderes fácticos para hacerle un fraude a Andrés Manuel López Obrador. En 2012, que pudo ser la tercera definitiva, otra vez el PRI, haciendo mancuerna con empresas comerciales, le impidieron por segunda vez al tabasqueño ser presidente de México. Hoy que está de moda el fútbol, no podemos
evitar pensar que al PRD le está pasando lo que al Cruz Azul: Parece que nunca volverá a ser campeón, y el partido del sol azteca parece que nunca llegará a Los Pinos. Como van, ni en cien años tendrán figuras como las de Cuauhtémoc Cárdenas o Andrés Manuel López Obrador. ¿Quién será el candidato del PRD en 2018 a la presidencia de la república?, ¿Chucho Ortega, Chucho Zambrano, Carlos Navarrete, Alejandro Sánchez Camacho, el "señor de las ligas", Angélica de la Peña, Hortensia Aragón, Dolores Padierna, Silvano Aureoles, Barbosa o Purificación Carpinteyro? Que Dios agarre confesada a la "izquierda moderna" del PRD, porque un día de estos, como están las cosas, hasta el registro pueden perder.

Lo mejor de la fiesta del 25 aniversario del Partido de la Revolución Democrática fue el pastel, perdón, el discurso que les regaló el Ingeniero Cárdenas, que puso a los de Nueva Izquierda, como diría el director de cine español Pedro Almodóvar, los chuchos al borde de un ataque de nervios. Mejor fecha no pudo escoger Cárdenas para decirles que están muy cerca del poder presidencial y muy lejos del proyecto que se construyó del partido, de frente les dijo que lo único que tenían como organización política eran los grupos de poder y las tribus peleándose por las prerrogativas, las diputaciones, senadurías y otras linduras. Ya encarrerado el gato, les recordó que la izquierda electoral solo es cómplice y entreguista, a los dueños del PRD, o sea, a los Chuchos, solo les gusta que el poder los llame "izquierda moderna", lo que quiere decir una izquierda light. Les dijo a los gerentes del PRD que la izquierda debe tomar acciones más radicales. Sin mencionar a López Obrador, dejó claro que el PRD nunca más debe dejar ir a un hombre como el tabasqueño, un político que en dos ocasiones los llevó a ser la segunda fuerza política del país, un político que les dejó altos porcentajes de votación, que obtuvo millones de votos, que los hizo diputados, gobernadores, presidentes municipales, senadores, jefes de gobierno en el Distrito Federal, los hizo poderosos
y millonarios, entre otras cosas. No pasará mucho tiempo para que los chuchos le llamen al chapulín colorado para que los ayude a seguir conservando sus privilegios.

¡Qué cosas tiene la vida, Mariana!: no fue necesario que un notable panista o un distinguido y encumbrado priísta les echara a perder su fiesta de cumpleaños. Fue el único líder moral que les quedaba, no sabemos por cuánto tiempo. López Obrador no se esperó a que cumplieran sus primeros 25 años les adelantó dos regalos: El primero lo abrirán en 2015, el segundo en 2018 y en una tarjeta les escribió un epitafio: Felicidades, excompañeros del PRD, espero sigan conservando su registro.